...Así que este es el adios...

Canadá realmente me da miedo; año con año surgen bandas interesantes de la tierra de la policía montada y Pamela Anderson. Una de las más singulares, tanto por su estilo como por su calidad (prácticamente una denominación de origen dentro de la escena indie canadiense), son sin duda los Junior Boys, o como me gusta llamarlos: "Los-cabrones-que-reinstauraron-mi-fe-en-el-electropop-con-tintes de-soul-blanco", quienes regresan este año con su segunda producción bajo el brazo, después de su aclamadísimo (al menos por mí) debut Last Exit del 2004.

Recuerdo que cuando escuché por primera vez "Birthday", su primer sencillo, tuve una sensación cuasiorgásmica en la parte de mi cerebro que percibe las ondas auditivas (Un Orejasmo??? Oidasmo??) y mi goce fua aún mayor cuando conocí el disco en su totalidad. Es por ello que el próximo material de estos tipos era una de los lanzamientos más anhelados por su humilde servilleta en este 2006.

El albúm en cuestión, titulado So This is Goodbye (Domino, 2006) contiene 10 nuevas razones para creer otra vez en la electrónica inteligente pero que conserva la virtud de la melodía; en la mezcla del pop y el motown con mucho downtempo y una finísima producción electrónica. Resaltan las vocales cautivadoras provistas por Jeremy Greenspan, artífice y compositor principal de los Junior Chavos. En definitiva, 10 canciones que desde ya (junto con Hot Chip y quizá Herbert) pueden ser consideradas de lo mejor del año en su estilo (y de la música en general). Canciones para una tarde-noche cachonda entre decoración minimal y cocteles a medio terminar. Canciones que me recuerdan mucho a tí, aunque ya no estés.


*Este post está dedicado con sumo cariño al Orrantía que estuvo jode y jode para que le subiera el disco. Pinche Julio, diga no a la piratería chavo.